«Mi designación como directora de la Academia de Bellas Artes evidencia que la mirada sobre las mujeres está cambiando»

JORGE PASTOR Granada Miércoles, 17 noviembre 2021, 10:31

«La administración no sabe qué hacer con las academias», asegura Orfilia Saiz, que reclama más ayudas públicas para su funcionamiento

–¿Qué aporta hoy día la Academia de Bellas Artes al mundo de la cultura en Granada?

–Aporta un juicio sólido y perenne frente a la variabilidad de lo político. También un trabajo generoso y profesional. Los miembros pertenecen a ella de forma altruista. Todo su trabajo revierte en la ciudad. Es una corporación con alta especialización, pero al mismo tiempo el hecho de abarcar tantas disciplinas, da una visión global y transversal de la cultura.

–¿Cree que la sociedad granadina conoce la Academia? Hablamos de una institución con casi 250 años de historia…

–No lo creo. Y no es positivo. Ese desconocimiento alimenta la idea de una elite inaccesible. Si hacemos una valoración histórica, los académicos han realizado una labor importante en Granada. Son conocidos pero no así la Academia. Esto es hasta cierto punto normal porque el trabajo de la Academia es discreto y de fondo.

–Uno de los grandes objetivos de su mandato es avanzar en la modernización de la Academia. ¿Qué iniciativas están llevando a cabo?

–Lo primero fue renovar la web. La hemos puesto en marcha con un contenido mínimo. A partir de ahí, hay que dotarla con una perspectiva histórica. También estamos trabajando en reactivar las relaciones con las instituciones, volviéndolas más fluidas, y mejorar la visibilidad. Ha habido mucho recelo por enseñar o participar con una opinión. Y por último retomar actividades incorporando nuevas tecnologías.

–Los fondos bibliográficos y el archivo son las grandes joyas de la Academia. ¿Qué están haciendo para su puesta en valor?

–Ordenarlos y luchar por su conservación. Uno de nuestros grandes problemas es la falta de espacio. Esto nos priva quizá de disfrutar al máximo de una de las partes más importantes de la Academia como son los fondos y el archivo.

–¿Qué medidas están adoptando para que haya más mujeres académicas? Ahora mismo existe una clara prevalencia de varones…

–Me niego a decir que haya que tomar medidas. No debería de hacer falta. Hay que apoyar, por supuesto, cualquier candidatura, e instar y velar para que los juicios que se emitan sobre ellas sean absolutamente libres sobre cualquier condicionamiento de género. La composición de nuestro claustro es un reflejo de lo que pasa en la vida laboral y en la académica, y evidentemente carga con la rémora de una prevalencia de hombres. Lo más importante es que la mirada está cambiando. De hecho, la apuesta de ellos por ponerme en la dirección es una evidencia de ello, y de que la aceptación de una candidatura es independiente del hecho de ser hombre o mujer.

–¿Cree que está suficientemente reconocida la labor de las mujeres en el mundo de las bellas artes?

–Ahora empezamos a tener una mirada igualitaria. Los resultados se tardarán en apreciar.

–La Academia Internacional de Órgano evidencia la preocupación de la institución por este instrumento. ¿Cree que se está haciendo lo suficiente para la recuperación y puesta en valor de los valiosos órganos que hay en la provincia?

–Granada posee un muy valioso patrimonio de órganos históricos. Hay que felicitarse por la restauración del de la Catedral, que es una joya a nivel mundial. Pero no existe una planificación, un conocimiento y una secuenciación de actuaciones en cuanto a la restauración y conservación. Por eso reclamamos declarar los órganos históricos como Bienes de Interés Cultural. En lo que respecta al Albaicín, el Patronato de la Alhambra podría acoger su conservación y restauración.

–Y en breve el Premio de Fotografía ‘Carlos Pérez Siquier’… No sé si han previsto algo especial con motivo de la muerte del maestro, académico además de Academia de Bellas Artes de Granada.

–Los 14 de noviembre hacemos desde hace 20 años un acto conmemorativo en recuerdo de los académicos fallecidos. Fue la fecha en que murió Falla, que también fue académico. E igual que hicimos el año pasado, en vez de un concierto en la Capilla Real, haremos un vídeo con música e imágenes. En este caso vamos a utilizar una composición de Juan Alfonso García, muy apropiada para este evento, y una selección de material fotográfico de Pérez Siquier que nos ha cedido el centro que lleva su nombre en Almería.

Frente común

–En su discurso de inicio del curso usted apuntó a la necesidad de que las principales ‘arterias culturales’ de Granada, como la OCG, el Festival, los conservatorios… conformen una mesa para hablar sobre intereses comunes. ¿Se ha dado algún paso en este sentido?

–El primer paso ha sido hablar con la concejala María de Leiva y con el coordinador municipal de Cultura, José Vallejo, para ver cómo debería de ser esta mesa, que puede plantearse como apoyo a la Capitalidad Cultural en 2031. Nuestra posición es sumar y actuar porque tenemos una visión global, objetiva y periférica. A esas entidades que usted menciona, habría que sumar otras como las artes plásticas, la cerámica e incluso los estudios árabes.